La última reforma del código penal ha introducido importantes modificaciones en el artículo 31 bis de este cuerpo legal, relativo a la responsabilidad penal de las personas jurídicas. Así mismo, la fiscalía general del Estado ha emitido la circular 1/2016, sobre la responsabilidad penal de las personas jurídicas tras la reforma del código penal. Ambos textos remarcan la importancia que tienen los programas de gestión y organización internos de cada compañía a la hora de fijar la responsabilidad penal de los entes jurídicos.

En el apartado 1 b) del artículo 31 bis del código penal se establece la culpabilidad de estas entidades en caso de que hayan incumplido gravemente los deberes de supervisión, vigilancia y control de su actividad atendidas las concretas circunstancias del caso,

Estos deberes de supervisión, vigilancia y control pasan en primer lugar por la formación de los trabajadores, con la promulgación de un código ético interno actualizado a las nuevas necesidades legalmente exigidas. A su vez, es trascendental el establecimiento de un sistema de prevención jurídica que permita identificar el riesgo, controlarlo y gestionarlo.

Con la ejecución de estas medidas si la empresa incurriera en el tipo de algún delito previsto en el código penal sería eximida de toda responsabilidad, tal y como acuerda el apartado segundo del artículo 31 bis del código penal.

Por lo tanto, es necesario establecer las políticas y procedimientos adecuados y suficientes para garantizar que una persona jurídica, incluidos sus directivos, empleados y agentes vinculados, cumplen con el marco normativo aplicable, las políticas internas y las relaciones con terceros: clientes, proveedores

Identificamos los riesgos a los que se enfrenta la empresa, teniendo en cuenta su severidad e impacto y la probabilidad de que se den.

  • Prevenimos: conociendo los riesgos, se debe diseñar e implementar procedimientos de control que protejan a la empresa.
  • Detectamos: se informa de la exposición de la empresa a los riesgos
  • Auditamos: se efectúa un seguimiento periódico.
  • Resolvemos : cuando pese a todo surge algún problema de cumplimiento, trabajamos para su solución.
  • Asesoramos: facilitamos toda la información necesaria  a los directivos y trabajadores  para llevar a cabo su trabajo de acuerdo con la normativa vigente.